En la actualidad uno de los problemas más comunes es la baja autoestima, que trae consigo una percepción negativa sobre uno mismo. Este problema nos limita y en muchas ocasiones es imperceptible.
Tener una baja autoestima genera otro tipo de problemas como ansiedad, depresión, problemas de conducta, estrés, adicciones, por mencionar algunas. La buena noticia es que se puede incrementar la autoestima, solo hay que ponerle dedicación y empeño.
Comencemos por definir que es el autoestima, son todas aquellas creencias, percepciones, evaluaciones y pensamientos que tenemos sobre nosotros mismos, esta valoración fue realizada en base a nuestras experiencias.
En la mayoría de los casos, surgen síntomas que nos advierten si se tiene un autoestima bajo. A continuación te presento una lista:
- Inseguridad en tí mismo
- Miedo al rechazo o a ser críticado
- Creer que las opiniones personales, no tienen el mismo valor que las opiniones de los demás
- Pensar que las cosas buenas no son para ti
- No esforzarte por conseguir las cosas que quieres
- Necesitar la aprobación de los demás
- Ser retraído con otras personas
- Dejarse pisotear por los demás, no imponerse cuando es necesario
- Ver a las otras personas superiores a mí, querer ser como ellos
- Envidiar la vida de los otros
- Temor al expresar los sentimientos
- Atribución de los logros a causas externas y los fracasos a causas internas
- Falta de felicidad
- Sentirse culpable
- No estar contento con lo que haces
- Tener desmotivación
- No terminar las cosas que inicias
- Dificultad en la toma de decisiones
- Enfocarse más en las debilidades que en las fortalezas
- Nerviosismo
- Sentirte evaluado constantemente por la sociedad
- Creer que eres poco atractivo
- No tomar la iniciativa de las cosas
- Pensar que no tienes nada que aportar
Si alguna vez te has sentido así, podría ser que el resto de tus problemas son originados por tener una baja autoestima. En esta ocasión te comparto algunos ejercicios para incrementar tu valoración como persona y que comiences a creer en ti. Los resultados podrían sorprenderte, una vez que tus capacidades mejoren y tu autoestima mejore. Pero se requiere tener conciencia de la situación, constancia y ejecución de los siguientes consejos.
- Nadie es perfecto: Aprende a ser realista con respecto a tus virtudes y defectos. El objetivo de esta vida es ser feliz, para lograrlo debes aprender aceptar las cosas que sabes hacer bien y valorarlas. Realiza un análisis para identificar en lo que eres bueno y las cosas que te salen a la perfección. Quita ese pensamiento de que eres un desastre y lo que haces no te sale bien.
- Actitud positiva: Comienza a cambiar tus pensamientos negativos y sustitúyelos por positivos. Cambia el "no puedo" por un "voy a intentarlo", "lo voy a conseguir", "me saldrá bien". Es algo que se repite muy a menudo, pero si te esfuerzas a mirar las cosas buenas de la vida, te ayudará a salir de esa zona negativa en la que te encuentras.
- Establece metas realistas: Muchos cometen el error de definir metas que no se pueden cumplir. Se debe hacer lo contrario, establecer metas a las cuales sea sencillo llegar. Una vez alcanzadas se pueden ir incrementando y con el paso del tiempo te darás cuenta de que comienzas a obtener lo que te propones. Cuando fracasas, aprende de ello en lugar de culparte por los errores. Recuerda que fallar es una manera para aprender hacer las cosas bien. Atrévete a afrontar retos.
- Evita las comparaciones: Cada persona tiene su vida y tú eres el dueño de la tuya, así que céntrate en ti, en tus cosas, en tu mundo. Evita la envidia y adopta la idea de que lo único que haces al sentirla es creer que eres un desgraciado. Siempre habrán personas mejores o peores que tú.
- Comienza aceptarte: Para identificar las cosas que no te gustan de ti, es recomendable escribirlas. También anota todas aquellas situaciones de las cuales te sientes culpable, no omitas nada. Léela con atención, valora lo que puedas mejorar. Una vez estudiada destruye el texto, hazlo mil pedazos. A partir de ese momento comienza desde cero, deja atrás la culpa y exprime lo que aprendiste. Aún estas a tiempo de iniciar de nuevo.
- Realiza críticas constructivas hacía tu persona: Haz que las cosas que digas solo sean para mejorar y no para estancarte o culpabilizarte. Acepta las críticas de los demás de una forma que no te afecten.
- Autorespeto: Comienza a tratarte con cariño, respeto. Recuerda que eres único en este mundo, eres lo mejor que te ha pasado, así que demuéstralo. Tienes derecho a ser feliz.
- Toma el control de la situación: La mayoría de las personas llevan una carga en sus hombros, al tener trabajos con los que no se sienten a gusto, tener relaciones que no aportan nada positivo, adquirir malos hábitos, entre otros. Para reducir ese peso es necesario tomar el control de la situación e intentar cambiarlos.
- Invierte tiempo en ti: La mejor manera de encontrarse con uno mismo y desarrollar las habilidades, es haciendo actividades que te hagan feliz, meditando y analizando tu situación.
- Agradece por las cosas: Antes de dormir piensa en las cosas buenas que te aporto el día, los retos superados, los errores cometidos y analiza como puedes ser una mejor persona. Por la mañana agradece las cosas buenas que tienes en tu vida.
Realiza estos ejercicios por 30 días y verás que al concluir te sentirás mejor y muchos síntomas comenzarán a desaparecer. Recuerda que no hay nadie que te pueda cambiar. Si tu no quieres jamás lo harás, el único capaz de generar un cambio en ti, eres tú.